Crítica

Crítica: La traviata, mis hermanos y yo de Yohan Manca

Crítica de «La Traviata, mis hermanos y yo» de Yohan Manca | Esta ópera prima que se presenta en la Muestra Internacional de Cine cuenta la historia de un niño que encuentra múltiples trabas para seguir su amor por la música.

El camino del arte

Por Pablo Zamora

La Traviata, mis hermanos y yo (Mes frères et moi, 2021) de Yohan Manca cuenta la historia de Nour (Maël Rouin Berrandou), un chico de 14 años quien al comenzar sus vacaciones de verano decide informarles a sus hermanos mayores que dejará la escuela para buscar un trabajo, tal y como ellos lo hicieron en el pasado. En casa, con la ausencia de un padre (producto de la muerte) y con una madre en coma, el hermano mayor Abel (Dali Benssalah) es quien funge como líder entre los personajes; la interacción entre hermanos lleva consigo hostilidades y masculinidades crecientes, que van detonando aún más por el afán de mantener a su madre en casa hasta que muera. Entre todas estas tragedias surge un escape para Nour, encontrando en la música de ópera un sitio para refugiarse y tal vez buscar un camino en su futuro.

Anuncios

Este nuevo horizonte de la ópera es mostrado por Sarah (Judith Chemla), una maestra de canto que invita a Nour a clases mientras él se encuentra en servicio por corrección. Pero este camino no será fácil para el protagonista, quien carece de suerte para que sus hermanos entiendan sus inquietudes artísticas, aunado a la poca libertad que tiene para llegar a tiempo a sus nuevas clases y a la necesidad de un trabajo para poder solventar algunos gastos del cuidado de su madre.

Fotograma de la película «La Traviata, mis hermanos y yo» de Yohan Manca.

«Lamentablemente no cuenta con algún elemento innovador».

El arte como salvación es un discurso que hemos visto en muchas películas, sin duda es vistoso y disfrutable cuando se hace de una forma creativa. El problema de este tema es que ha sido contado tantas veces que es casi imposible caer en estereotipos o historias recurrentes: familiares que no comprenden los intereses artísticos del protagonista, un salvador acomodado, e incluso el talento por el canto o los instrumentos. Esta cinta cae en todo lo antes mencionado y lamentablemente no cuenta con algún elemento innovador, existen algunos momentos divertidos producidos por el personaje de Sofian Khammes, el hermano gigolo del protagonista, pero fuera de eso resulta incluso cursi, melodramática e inverosímil.

La Traviata, mis hermanos y yo forma parte de la 71 Muestra Internacional de Cine de la Cineteca y podrá verse en el recinto desde el día 12 abril, para posteriormente recorrer el circuito cultural de la muestra.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: